Dos hermanas de 13 y 17 años confesaron haber matado a su abuela a martillazos y arrojado el cuerpo a un pozo con la ayuda del novio adolescente de una de ellas, que luego fue encontrado muerto de un tiro en la cabeza en una casa de la localidad chaqueña de Fontana.
Fuentes policiales informaron que aún no se determinó si el chico que apareció fallecido se suicidó o fue asesinado por las otras dos chicas.
Cuando los efectivos de la seccional local fueron hasta la vivienda hallaron al adolescente muerto de un tiro en la cabeza sobre la cama de una de las habitaciones y un revólver calibre 38 a su lado, dijeron los informantes.
El investigador consultado añadió que las hermanas, que vivían con su madre, aparentemente padecían problemas con las drogas y en ese marco habría ocurrido una pelea que resultó fatal.
Y una vez mas, la droga hace estragos y todo demuestra que la juventud ya no valora para nada la vida.
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